En la encrucijada de las calles Francisco J. Peinado y 12 de Julio en la ciudad de Bonao, un personaje singular ha estado presente por años, apodado cariñosamente como «El Bomberito». A pesar de su apodo afectuoso, su presencia se ha convertido en una fuente de preocupación para los ciudadanos y comerciantes que transitan por esta intersección, y su imagen descuidada y estado de abandono son difíciles de ignorar.
Es lamentable que ni el alcalde Eberto Nuñez de Bonao ni Badia de Coramón hayan brindado la atención y el cuidado necesarios a este lugar. La intersección en cuestión, en lugar de ser un reflejo de «Bonao, una ciudad moderna», se ha convertido en un recordatorio de la indiferencia y el abandono por parte de las autoridades.
El estado deplorable de El Bomberito no solo afecta la estética del lugar, sino que también plantea graves preocupaciones de salud pública. Su acumulación de agua estancada, particularmente en tiempos de lluvia, no solo es un foco de malos olores, sino que también podría facilitar la proliferación de mosquitos y aumentar el riesgo de brotes de enfermedades como el dengue. Este problema de salud pública debería ser motivo suficiente para que las autoridades tomen medidas inmediatas.
Es sorprendente que los comerciantes y residentes del lugar hayan adoptado a El Bomberito como parte de la comunidad sin darse cuenta de que su presencia descuidada está afectando negativamente su entorno. La falta de acción de las autoridades no solo está descuidando un espacio público importante, sino que también está comprometiendo la seguridad y el bienestar de la comunidad.
Además de lo preocupante que es el brote de agua del bomberito nuestras autoriales deben sentir vergüenza propia del deterioro de las aceras y contenes de la calle Francisco J. Peinado una de la principales vías de transito de nuestra ciudad moderna.
Es fundamental que el alcalde municipal de Bonao Eberto Nuñez y Badia de CORAMON presten atención a esta cuestión y tomen medidas para remediarla. La limpieza y el mantenimiento de El Bomberito o su eliminación son esenciales para garantizar un entorno seguro y saludable para todos los ciudadanos de Bonao.
Además, esto es una oportunidad para demostrar que las autoridades están comprometidas con el bienestar de la comunidad y que el lema «Bonao, una ciudad moderna» es más que palabras en un eslogan.
Los problemas locales, como El Bomberito olvidado, no deben pasarse por alto, ya que afectan directamente la calidad de vida de los ciudadanos. Es hora de que las autoridades den prioridad a estos asuntos y trabajen en conjunto con la comunidad para solucionarlos. La recuperación y revitalización de El Bomberito pueden ser un pequeño paso, pero un paso importante hacia una ciudad verdaderamente moderna y comprometida con el bienestar de sus habitantes.
LIC. ALEXIS ROSARIO, CDP, SNTP, SIP
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