El cierre de la frontera con Haití ordenado por el presidente Luis Abinader este 14 de septiembre de 2023 ha generado una gran controversia en la región y el mundo. La medida, que responde a la construcción del muro y el desvío de las aguas del río Masacre por parte de Haití, tiene implicaciones económicas, políticas y sociales que afectan tanto a la República Dominicana como a su vecino.

Desde el punto de vista económico, el cierre de la frontera implica la suspensión del comercio bilateral, que según datos de la Dirección General de Aduanas, ascendió a más de 800 millones de dólares en 2022. Esto representa una pérdida de ingresos para ambos países, especialmente para Haití, que depende en gran medida de las importaciones dominicanas de alimentos, combustibles y productos manufacturados. Además, el cierre afecta a miles de trabajadores informales que cruzan la frontera diariamente para ofrecer sus servicios o vender sus mercancías.

Desde el punto de vista político, el cierre de la frontera agrava la tensión diplomática entre los dos países, que ya venía deteriorándose desde hace años por temas como la nacionalidad, la migración y el medio ambiente. El gobierno dominicano ha denunciado ante la comunidad internacional las acciones unilaterales de Haití, que considera una violación a su soberanía y a los tratados internacionales

Desde el punto de vista social, el cierre de la frontera afecta a las familias y comunidades que viven a ambos lados de la línea divisoria, que comparten vínculos históricos, culturales y familiares. El cierre dificulta la comunicación, el intercambio y la convivencia entre estos grupos, que se ven separados por una barrera física y simbólica. El cierre también genera un clima de incertidumbre, miedo y hostilidad entre los habitantes de la zona fronteriza, que pueden ser víctimas de actos de violencia o discriminación.

El cierre de la frontera con Haití es una situación compleja y delicada, que requiere de un diálogo constructivo y respetuoso entre las partes involucradas, así como de la solidaridad y cooperación de la comunidad internacional. Solo así se podrá encontrar una solución pacífica y duradera al conflicto, que garantice el bienestar y los derechos de ambos pueblos.

LIC. ALEXIS ROSARIO, CDP, SNTP, SIP

PERIODISMO RESPONSABLE

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