El preaviso y la cesantía son dos conceptos que se relacionan con la terminación de un contrato de trabajo por tiempo indefinido, ya sea por parte del empleador o del trabajador. En este artículo te explicaremos qué significan estos términos y cómo se calculan.
El preaviso es el aviso previo que debe dar una de las partes a la otra para poner fin al contrato de trabajo, sin alegar causa alguna. El preaviso tiene como objetivo darle tiempo a la otra parte para que se prepare para la finalización de la relación laboral y busque una nueva opción.
El preaviso debe darse por escrito si es el empleador quien termina el contrato, y puede ser verbal o escrito si es el trabajador quien renuncia. En ambos casos, se debe informar al Departamento de Trabajo o autoridad local en funciones dentro de las 48 horas siguientes.
El plazo del preaviso depende del tiempo que el trabajador haya estado en la empresa, y se establece de la siguiente manera:
– De 3 a 6 meses: 7 días de preaviso
– De 6 meses a 1 año: 14 días de preaviso
– Más de 1 año: 28 días de preaviso
Durante el tiempo de preaviso, se mantienen todas las condiciones y obligaciones del contrato. Además, el trabajador tiene derecho a un permiso remunerado de dos medias jornadas a la semana para buscar un nuevo empleo.
Si una de las partes no da el preaviso o lo da de forma insuficiente, debe pagar a la otra una indemnización sustitutiva equivalente a la remuneración que le hubiera correspondido al trabajador durante el plazo del preaviso.
La cesantía es la indemnización que debe pagar el empleador al trabajador cuando termina el contrato de trabajo por desahucio, es decir, sin alegar causa justificada. La cesantía tiene como finalidad reconocer el aporte del tiempo que el trabajador ha dado a la empresa y ayudarle económicamente mientras se reincorpora al mercado laboral.
La cesantía se calcula en base al salario ordinario promedio del trabajador y al tiempo que haya estado en la empresa, según la siguiente escala:
– De 3 meses a 6 meses: 6 días de salario
– De 6 meses a 1 año: 13 días de salario
– De 1 año a 5 años: 21 días de salario por cada año
– De 5 años en adelante: 23 días de salario por cada año
La cesantía no aplica cuando el trabajador renuncia voluntariamente, salvo que demuestre que lo hizo por causa justificada imputable al empleador, como incumplimiento de las condiciones del contrato, maltrato físico o moral, acoso sexual o laboral, entre otras.
Es importante que conozcas tus derechos y deberes como trabajador o empleador en caso de terminación del contrato de trabajo por tiempo indefinido. Si tienes alguna duda o necesitas asesoría legal, puedes consultar con un abogado especializado en materia laboral.
LIC. ALEXIS ROSARIO,
CONSULTOR TRIBUTARIO CERTIFICADO