A menudo se subestima el papel del hilo dental en el cuidado bucal diario, relegándolo a un segundo plano detrás del cepillado. Sin embargo, este paso esencial va más allá de ser un simple complemento: es crucial para prevenir problemas serios tanto en la salud oral como general.

El cepillo de dientes, a pesar de sus avances, no puede limpiar completamente los espacios interdentales. Aquí es donde el hilo dental se vuelve indispensable, eliminando restos de comida y placa que el cepillado no alcanza, previniendo así la formación de sarro y enfermedades periodontales. Estas últimas no solo dañan la boca sino que están relacionadas con enfermedades cardíacas, diabetes y otros problemas de salud significativos.

Además, el hilo dental es esencial para combatir el mal aliento y permite detectar a tiempo signos de problemas bucales, como el sangrado de encías. A pesar de su importancia, muchos crecen sin aprender a utilizarlo adecuadamente, lo que representa un desafío educativo para los profesionales de la salud dental.

La placa bacteriana se acumula entre cada diente y muela, y es en estos espacios donde a menudo se forman caries como resultado de una limpieza inadecuada. Estas áreas son propensas a acumular restos de comida y bacterias que, si no se eliminan eficazmente, pueden conducir a la descomposición dental y a problemas de salud bucal más serios. La limpieza regular de estos espacios interdentales es crucial para prevenir la formación de placa y mantener una boca saludable.

El hilo dental, tal como lo conocemos hoy, fue inventado en 1815 por el Dr. Levi Spear Parmly, un dentista de Nueva Orleans. El Dr. Parmly introdujo el hilo dental como un método esencial para mejorar la higiene oral, enfatizando la importancia de limpiar entre los dientes para eliminar la placa y los residuos alimenticios, áreas que a menudo son inaccesibles con el cepillo de dientes. Esta innovación no solo revolucionó los cuidados bucales personales, sino que también sentó las bases para las prácticas de higiene dental que seguimos recomendando y practicando hoy en día.

Es hora de que tanto la sociedad como las iniciativas de salud pública reconozcan y promuevan el uso del hilo dental no como un extra opcional, sino como una herramienta indispensable para el cuidado integral de la salud. La próxima vez que consideres omitir el hilo dental, recuerda que lo que está en juego es mucho más que tu sonrisa.

DR. ALEXIS MARMOL-PLAMED